Se confirman los primeros casos de la enfermedad del Nilo Occidental en Texas de este año

El Departamento Estatal de Servicios de Salud de Texas ha confirmado tres casos de la enfermedad del Nilo Occidental, los cuales fueron reportados la semana pasada por las autoridades sanitarias de Austin, Dallas y Galveston. De ellos, dos son de enfermos con la fiebre del Nilo Occidental, dados a conocer por Salud Pública de Austin y el Distrito de Salud del Condado de Galveston, y el tercero es un caso de enfermedad neuroinvasiva dado a conocer por Salud y Servicios Humanos del Condado de Dallas.

La enfermedad del Nilo Occidental se adquiere a través de la picadura de un mosquito infectado. Las autoridades informaron que el año pas-ado se presentaron 135 casos de la enfermedad del Nilo Occidental en Texas, de los cuales seis fueron mortales. En Texas, en los diez últimos años se han presentado más de 3,500 casos y 167 muertes a causa de esta enfermedad.

A fin de protegerse y proteger a su comunidad, se recomienda tomar las siguientes medidas para evitar las picaduras de mosquitos y reducir la propagación de estos:

Mientras esté en lugares exteriores, aplíquese con regularidad repelente de insectos registrado por la EPA.

Deshágase de toda agua estancada en casas y negocios o en sus alrededores para evitar que los mosquitos depositen allí sus huevos.

Use el aire acondicionado. Si va a abrir puertas o ventanas, compruebe que los mosquiteros estén en buenas condiciones para evitar que entren mosquitos.

Cúbrase con mangas y pantalones largos para evitar las picaduras.

La mayoría de las personas que contraen el virus del Nilo Occidental no llegan a enfermarse. De ellas, aproximadamente el 20 por ciento desarrolla la fiebre del Nilo Occidental, que puede ir acompañada de dolor de cabeza, dolor muscular y en las articulaciones, náuseas, diarrea y fatiga. Quienes contraen esta enfermedad suelen recuperarse por sí mismos, si bien los síntomas pueden extenderse varias semanas. Menos del uno por ciento de las personas contagiadas llegan a presentar la enfermedad neuroinvasiva del Nilo Occidental, un padecimiento más grave en el cual el virus infecta al sistema nervioso. Además de los síntomas de la fiebre del Nilo Occidental, esta enfermedad puede ir acompañada de tortícolis, debilidad muscular, pérdida de la vista, temblores, convulsiones, desorientación, coma y parálisis. La recuperación puede tomar varios meses, y algunos de los daños al sistema nervioso pueden llegar a ser permanentes. Aproximadamente una de cada diez personas que contraen la enfermedad neuroinvasiva del Nilo Occidental muere.

Todo aquel que presente síntomas de la enfermedad del Nilo Occidental debe llamar a su médico para ver si es necesario hacerse pruebas de laboratorio. No hay vacuna contra la enfermedad del Nilo Occidental ni tratamiento específico para ella, pero algunos medicamentos sin receta y de otro tipo pueden ayudar a aliviar los síntomas.

Para ver más información sobre la vigilancia de la enfermedad del Nilo Occidental y un enlace al número actualizado de casos en el estado, visite TxWestNile.org.