Solicitantes de asilo inundan el sur de Nuevo México

Por el personal de los periódicos Sentinel e Internacional

SUR DE NUEVO MÉXICO – Más de 900 migrantes centroamericanos han sido detenidos por agentes de la Patrulla Fronteriza de los EE.UU. en el sur de Nuevo México y cerca de El Paso desde la semana pasada, según informan los comunicados de prensa emitidos por la agencia federal.

Los agentes arrestaron a un grupo de 290 migrantes no documentados en una Base de Operaciones Avanzada (FOB, por sus siglas en inglés) ubicada en el Puerto de Entrada de Antelope Wells, cerca de Lordsburg, Nuevo México, el viernes, 8 de febrero.

Y el lunes por la noche, otros 330 migrantes fueron detenidos cerca del puerto de Antelope Wells mientras que 311 inmigrantes fueron recogidos cerca del Monte Cristo Rey, que está cerca de El Paso, y en Sunland Park y en Santa Teresa, Nuevo México.

Roger Maier, portavoz de la agencia, dijo el martes que la mayoría de los detenidos se entregaron a los agentes de la Patrulla Fronteriza y buscan asilo.

El viernes, los agentes de la Patrulla Fronteriza que estaban trabajando en la FOB del Campamento Militar Bounds en Antelope Wells observaron un gran grupo que atravesaba ilegalmente la frontera y se adentraba en los Estados Unidos.

El grupo consistía de personas de Guatemala, Nicaragua, El Salvador y Honduras.

El día anterior, los agentes habían observado a un grupo de personas vestidas de camuflaje que se escondía en el lado mexicano de la frontera cerca del lugar donde entró de forma ilegal. Parecían estar analizando la zona para observar posibles puntos débiles, lo que permitió a los agentes prepararse para la actividad ilegal durante los períodos nocturnos.

Durante las entrevistas e investigaciones iniciales, los agentes de la Patrulla Fronteriza detectaron a un varón menor guatemalteco con signos de enfermedad. El menor y su padre fueron trasladados, vía ambulancia, a un hospital local para recibir tratamiento.

Aquella mañana, las temperaturas en esa zona del estado estaban bajo cero y los traficantes vinculados con este suceso no mostraron ningún sentimiento de seguridad ni de valor para la vida humana cuando guiaron ilegalmente a este grupo a los Estados Unidos.

En muchos casos, las organizaciones criminales están saturando las zonas con grandes grupos con la creencia de que podrán pasar hacia los Estados Unidos estupefacientes u otro tipo de contrabando mientras los agentes de la Patrulla Fronteriza estén ocupándose de aquellos grupos.

Un minuto después de la medianoche del lunes, otro gran grupo de 330 inmigrantes no documentados fueron detenidos por los agentes de la Patrulla Fronteriza que estaban trabajando en la FOB del Campamento Militar Bounds en el puerto de Antelope Wells.

Este grupo, al igual que los que le precedieron, estaba compuesto principalmente de familias y menores no acompañados centroamericanos.

Los técnicos de emergencia médica de la Patrulla Fronteriza realizaron chequeos médicos y decidieron que ninguno de los sujetos precisaba de atención médica inmediata.

Se trata de una situación en curso a la que se enfrentan los agentes de la Patrulla Fronteriza en el sur de Nuevo México: centenares de padres y niños encontrados por los agentes tras haber iniciado a un viaje peligroso en manos de traficantes sin escrúpulos.

Se trata del 28° gran grupo, de más de 100 personas, desde el inicio del año fiscal únicamente en esta zona en el Sector de El Paso. Grandes grupos similares también están siendo encontrados en otras ubicaciones de la frontera.

Las organizaciones criminales siguen explotando las vidas humanas inocentes para poder aumentar sus actividades delictivas sin tener en cuenta los riesgos para las vidas humanas. En la mayoría de los casos, los traficantes nunca atraviesan la frontera ellos mis-mos para poder evitar su detención.

Y poco antes de la medianoche del lunes, los agentes de la estación de Santa Teresa que estaban trabajando cerca del Monte Cristo Rey, observaron un gran grupo de 311 migrantes no documentados que ultrapasaron una valla peatonal en Sunland Park y los detuvieron.

Aunque esta tendencia ha sido una constant en la zona de Antelope Wells en Nuevo México, se trata del primer gran grupo encontrado en esta zona este año fiscal.

Al igual que con los grupos anteriores encontrados en Antelope Wells, este grupo estaba compuesto principalmente de familias y menores no acompañados centroamericanos.

Este grupo fue trasladado a la Estación de la Patrulla Fronteriza de Santa Teresa para tramitar su situación.

El tráfico de grandes grupos dentro de las comunidades locales presenta varios retos a la hora de asegurar que los criminales no usen estas tácticas para explotar los puntos débiles, dijo la Patrulla Fronteriza.

Las organizaciones criminales siguen buscando maneras de hacer desviar los recursos de la Patrulla Fronteriza desde una zona has-ta otra con la esperanza de crear brechas en la cobertura donde puedan trasladar estupefacientes y criminales.

Los agentes permanecen alertas para contrarrestar esos intentos y proporcionar la seguridad fronteriza que es primordial para nuestros ciudadanos.

Traducción de MIRIAM HALPERN CARDONA