La Ciudad paga al IRS impuestos atrasados, sanciones e intereses

$800,000 y contando

PRESIDIO – La ciudad de Presidio ha cogido dinero del fondo general para pagar al Servicio de Impuestos Internos (IRS) unos 800,000$ en impuestos atrasados, sanciones e intereses. Esa información fue diseminada en una reunión del concejo municipal que tuvo lugar el 27 de junio, y la ciudad pensó que ya había pagado su deuda fiscal con el recaudador de impuestos federales.

Pero dos días después de la reunión del consejo, José “Joe” Portillo Jr. –administrador municipal– dijo que el IRS había presentado a la comunidad fronteriza con una factura adicional de 68,000$ en sanciones.

“Pensé que ya habíamos acabado (con el IRS),” dijo. “Y ahora tenemos una nueva carta de ellos.”

La factura de impuestos que casi llega al millón de dólares proviene de los cuatro años –del 2013 al 2016– en que la ciudad no realizó las auditorías fiscales externas obligatorias. Solo fue a principios de este año cuando la ciudad aceptó y adoptó las auditorías morosas, que llegaron con opiniones adversas y que, según las prácticas de contabilidad generalmente aceptadas, equivalían a un suspenso. Los hallazgos de esas auditorías desvelaron una historia de gastos no documentados y una falta de supervisión administrativa. En realidad, los problemas surgieron en 2012 cuando la ciudad aceptó una auditoría con una opinión adversa.

La ciudad sí tuvo la opción de apelar la factura del IRS, pero un correo electrónico de un consultor municipal obtenido por el periódico The Presidio International en una solicitud de documentos accesibles al público señala que hay pocos archivos o ningún archivo que pueda respaldar una apelación.

El IRS “nos proporciona el proceso para apelar la evaluación, pero tengan en mente que nadie fue cesado ni recibió ningún tipo de acción disciplinaria… en referencia a estas faltas,” según dice el correo del consultor. “Esa falta de asuntos no ayudará al IRS a comprender nuestra sinceridad respecto a los errores ni la simple responsabilidad de los empleados.”

El correo continuó, “Nuestro problema municipal es que no tenemos los documentos disponibles para apelar.”

Portillo dijo que la ciudad recibió 137 avisos del IRS para pagar su factura de impuestos y que nunca actuaron al respecto. “Ni los ciudadanos de esta comunidad ni el administrador municipal se merecen este problema,” escribió el consultor.

Los impuestos del IRS deberían haber sido pagados al menos mensualmente y presentados mediante un formulario (formulario 941) ante el IRS cada tres meses de cada año. Los impuestos son las retenciones federales y retenciones de Seguridad Social y Medicare de los salarios de los empleados y la parte que le corresponde pagar a la Seguridad Social y Medicare por parte de la Ciudad de Presidio.

Cuando las auditorías morosas finalmente fueron aceptadas a principios de este año, el consejo autorizó un gasto para llevar a cabo una auditoría forense a través de una empresa de Austin. Una auditoría forense es la inspección y la evaluación de la información financiera de una empresa o un individuo para su uso como prueba en un juzgado. Una auditoría forense puede ser llevada a cabo para poder encausar a una parte por fraude, malversación y otras reclamaciones financieras.

Pero el consejo ha sido reacio a buscar culpables en este asunto, tal vez porque se siente un poco cómplice ya que no hizo nada durante cuatro años mientras se deterioraba la posición financiera de la ciudad.

Marco Baeza, jefe de policía, era el administrador municipal durante aquel período.

Portillo dijo que la auditoría forense debería estar finalizada pronto y presentada ante el consejo y el público. Dijo que las preocupaciones financieras de la ciudad han sido una carga pesada desde que asumió el cargo de administrador municipal en 2016. Pero hasta que no se restaure la salud financiera municipal, otros asuntos urgentes deben ser priorizados.

“No quiero que la ciudad termine en la bancarrota, tal y como la heredé,” dijo Portillo. “Pero seré muy prudente.”

La ciudad necesita nueva maquinaria pesada, y un plan de drenaje para las aguas pluviales, y mucho más, dijo. “Pero no hasta que dejemos todo esto detrás…”

Ha habido un poco de éxito. La ciudad ha comprado un nuevo sistema de contabilidad y el personal está formado para usarlo. Han sido abordados entre el 60 y el 70 por ciento de los campos problemáticos identificados en las auditorías.

Para ayudar a aligerar la carga, Portillo ha pedido al consejo un administrador municipal adjunto. Hay una subvención municipal de Planificación y Desarrollo de Capacidades para crear un Plan Integral que creará una visión para el futuro de Presidio. Una empresa local –Kleinman Consultants– trabajará con el personal municipal, el consejo y una recién creada Comisión de Planificación y Urbanización para hacer participar al público en temas relacionados con el agua, la infraestructura de aguas residuales, las inundaciones, los parques, la vivienda y las calles. El consejo nombró al consejo de Planificación y Urbanización a Alma Martín, Juan José Muñiz, Juan Sáenz, José Sáenz y Janet Van Zee.

Vicky Carrasco, de Klein-man, explicó que la subvención ayudará a evaluar los problemas y las necesidades comunitarios y a crear un plan para guiar el futuro de la ciudad. El Plan Integral ayudará a la ciudad a trabajar en algunos de estos problemas socioeconómicos a través de la participación pública para idear soluciones sostenibles. El último plan fue desarrollado en 1988.

Ya han comenzado las obras en la expansión del puente internacional y se han aprobado las obras para reconstruir el puente ferroviario internacional que se quemó dos veces en incendios provocados. Nadie nunca ha sido arrestado al respecto.

Y el Departamento de Transporte de Texas ha embarcado en un plan para mejorar la carretera US 67, la conexión principal de Presidio con el mundo exterior. En cuanto al desarrollo económico, una planta de hormigón abrirá pronto y una tienda Burkes Outlet, que es parecida a TJ Maxx y Marshalls, tiene interés en venir a la ciudad.

Traducción de MIRIAM HALPERN CARDONA